camiones

Me gustan las madrugadas en que uno debe subir al camión: todo es nuevo, Guadalajara huele a recién creada, los pasajeros que van sentados dormitan y sólo los despierta el destello de una sirena de policía o el olorcito a jabón que llega, como brisa, de la niña bonita que va temprano a la escuela.

Para Mimi MimArla

Querida seño Berenjena, que probablemente no entienda la referencia: Ibamos a la molienda y yo grité: ay, la cartera... No recuerdo si su reloj orgásmico pide un counter-clockwise o si debo saltar la hora del té. Y la hora del lobo, cuánto dura ese minuto, Usted detiene el tiempo hasta el temblar de piernas y el zumbar de oidos -Llueve en mí, tu que sudas muy bonito...

Despertar

Pienso que Cortázar y su instructivo sobre cantar y llorar y subir y similares se me fue la idea, pero el asunto es que, para eso de la chambeada, uno tendría que hacerse de sus buenas derechas e izquierdas para levantarse más allá de lo temprano que uno acostumbra. Perdón si imito a otros maestros o algo así con la apropiación de discursos que no le tocan al narrador que narra según un lector, pero no hay justicia con el despertar más temprano de lo que uno acostumbra. Uno ya tiene pelos en la almohada y no puede andar con jaladitas de no quiero ir al trabajo, mamá, mis alumnos se burlan de mí porque soy feo y traiba un moco en la nariz cuando dije buenos días. Pero lo peor de esto es que uno se está levantando temprano para buscar empleo, no para ir a uno: ya que uno se asegura de la chamba, todo se acelera y hace más pasadero por el acto de la obligación, o tales son mis esperanzas. Lo que no cuadra en este levantar es cuando uno comienza a estirar las piernas y encuajarrangarse los güesos para después no descuajarrangárselos. Se lanza una patada a la izquierda y otra a la izquierda y otra a la derecha y otra ansina para que se desentuma. Pero en un desvelo anterior uno olvida que movió la cama y la patada a la izquierda hace que a uno le duela el artejo mayor como si lo hubiera usado para romper una piñata labrada en cantera...

La desdicadita

Mi estimada señora Cervantes cuyos besos deseo interminables o ineludiblemente narizgoneros: El comité editorial de este su blog se encontró con un gran dilema al leer su comentario que, además de enviar, publicó en nuestra ya tan profanada atmósfera sin miramientos de edad, color de piel, tamaño de cinturita, número de vueltas que una llanta da antes de reventar en un bache o siquiera una calificación inferior a noventa pero declarable como la mejor del grupo, olvida de qué está hablando. El chiste es que su entrada, dirigida solo a usted que tolera todo o mucho, sería muy difícil de preparar, pues de chistes locales uno no se logra entender nunca en un blog como éste y la debilidad a usted le importa un cuerno. Y como somos poetas y un par o trío o quaderna via de poetas... Por mujeres como tú, hay hombres como yo, que se pueden morir por dignidad mordiendo el corazón En adición a esto, cabe decir que este blog está deseando atraer comentarios y usted amenaza con sacar la lengua a todo aquel que comente en la entrada dedicada a usted, por lo que, nuevamente, de intelectualoide a intelectualoide, de arrebasador a Virguensteriano, tememos decirle que su entrada será negada hasta que aclaremos a qué se refiere con esclusivamente.

Noticia de última hora

A mi señal de búsqueda: "niñas desnudas echando maromas", se une la de "si quiere fidelidad cómprese un perro". Cuando quiera recomendar este blog, use a su discreción la que más le agrade de las dos y recomiende este sitio si en tal viere que sea de provecho a otros o a nadie, pues escrito está que de todas maneras caen ojos despistados a estas tierras acaecidas de acaesión. y si vos fallaredes yerros en mis originales, tened la libertad de encuajárselos en donde más provecho le fan de facer.

¿Noticias desde el subdesempleo?

Pues la verdad es que, siendo débiles, la leyenda de la debilidad ya no le queda al blog: hablo de deseos y otras margaritas y menjurges que no puede seguir eso. No es, tampoco, que me ponga a decir de mí que en mi mente me comienzo a concebir como un mamado que le puede entrar a los putazos intelectuales, pero así como que débil, débil, ya no. Entonces me puse a revisar mis problemas que ahora expongo: Tengo una novia que me pide que escriba algo en el blog, tengo un padre y una madre que no me piden mucho pero mueven mis cosas y guardan en cajones mis zapatos y otros afeites que porque "estorbo(an)", un hermano con más éxito económico y que probablemente se vaya a China, unos suegros o futuros suegros que nomás están peleando a mi chaparrita porque son más altos que yo, no tengo empleo, mis zapatos comienzan a decirme, con ayuda de la lluvia, que ya son viejos, tendré quizá 15 bebés de betta splendens cruza de plackat corriente con posible hembra corriente y sospecho que me van a salir darketos, tengo mi acto académico pendiente, y más importante que el resto: no tengo empleo. Así que heme aquí en la minipendeja, que es un estado como el del Santos o el infra que nos hace decir cosas acerca de la cordura y la sensatez, pero por el que no tengo que pagar regalías (Aunque de hecho no tengo que estar pagando regalías a nadie porque nadie me paga todavía por escribir pendejadas), con una solicitud de empleo que no sé a dónde entregar y cómo llenar en algo específico: qué soy ahorita. Veamos, tengo el plan de hacer el servicio social después, por lo que no puedo ser pasante sino hasta que se me libere del servicio social. Acabo de terminar mis semestres obligatorios y no hay un salón que diga decimoprimero, quizá porque con diez ya se hacen bolas las señoras. Mi tesis está en desarrollo, pero no la puedo entregar sino hasta tener grado de pasante o el servicio social liberado. Por lo tanto, el qué soy ahora en la carrera, ahora que no estudio porque ya no me quieren con la nariz entre los libros, se determina ahora como posible egresado. Una especie de mueble de la universidad con pocos deseos de ser sólo eso. Entoncens, con esos errores de definiciones, busco mi trabajo y se me ocurre que el tiempo extra lo use aquí. ¿qué será?, ¿cómo he de llamarle? ¿debo cambiar el formato del blog? ¿seguirá enterrado y muerto Lalo el que salía con Lagrimita? Como sea, dado que no pienso viajar más que aquí mismo, aquí van mis opciones:

• Mi reino por un empleo
• Noticias desde el Impleo
• Memorias desde el Subdesempleo
• Solo Empleos
• Quisiera ser un pez
• Seis toros seis
• Las puertas se abrirán sólo si la unidad está completamente parada

O dejarlo como la primera frase de google que traiga una visita hasta aquí... Mientras tanto, aunque no son verdaderas memorias y no he leído al señor Odontoievski, categorizo estas entradas que tengan que ver con el empleo bajo cierto tag. Es más, sólo haré eso y dejo lo de debilidad, que me lo merezco por no ser verdaderamente nada

Pal futuro

Imagino que no he de ser el único que piensa en qué hacer con su primer sueldo. Pues como soy un tipo sin empleo y en busca eterna de uno, o por lo menos tan eterna como una hoja perdida entre montones, haré mi presupuesto: Sí, la carrera no va a dar mucho, así que estimaré, si mi cheque es de dos mil pesoa, que los gastaré de la siguiente forma: desodorante 27 shampoo 25 navajas para afeitar 30 una bolsa de rancheritos 7 una bolsa de Selz 14 una bolsa de sechable para meter eso un DVD clonado 10 un sacudidor 12 una rosa 9 Un celular 300 dos blusas para Mimi y un pastel 430 Una cartera 70 Un perfume 240 Y ya. Entre las cosas a más largo plazo, serían: una lámpara para pecera 700 Un traje 800 Un auto 25,000 Una casa 2/3 700,000 Una pecera 11.000 Y, maldita sea, luego podré comprar libros. Esto último no urge mucho porque tengo muchos, pero creo que tal cosa es el sueño de todo letrado salioso de la carrera...