2 de octubre de 2007
No hay muertes bonitas
Perdónenme, señoras, esta entrada, pero es el único medio catártico en el que pocos me leen y yo me desahogo a las anchas.
Repitamos el título: "Nacer es condenar a morir". Agreguémosle: pero en el medio, debo decir, mejor dicho, segismundear: ya que me tratan así, qué pecado he cometido contra nosotros por sólo nacer.
Pero héles aquí que no tuve una adivina desde niño que presagiara mis beneficios, como nos cuentan que sucede con hijos de reyes y príncipes y todo el destino que me importa, por lo menos en las siguientes tres semanas, está atado a las manos de los que hablan de forma más directa con los dioses, es decir, con los reyes.
Miren, soy estudiante, y uno de los derechos se supone que es el garantizarnos el crecimiento académico a través de actividades extracurriculares, según lo establecido. Yo sé que no soy el único con dicho trámite y por eso nomás les digo que me ayuden con el costo más grande: de transporte. Yo me las arreglo ahí comprando atún, agua y pan y en la casa de algún meridoso caritativo. Y la fórmula es esa que muchos no entienden:
NO HAY DINERO
Mejor dicho: se lo dimos a personas que se van a Portugal y Venezuela y muchos otros que salen al "Exterior". No sé ustedes, pero del sistema político de Portugal no sé nada, así que, aunque no puedo tomar represalias de tipo alguno, espero que quienes vayan para allá no sean de derecho, pues esos viajes en los que se aprenden modelitos distintos no han rendido frutos hasta ahorita. Bueno, para exterior ya rendimos, pero antes de apoyar trámites en nacional, hay que ver los internos. Es decir, ya no hay.
Es muy distinto el "ya no hay" y el "ya no tenemos". Uno dice que simplemente no se quiere dar dinero y el otro dice que no les es posible. Entonces, sin saber a quién le debemos achacar el problema, es obvio que hablar de la injusticia contra un grupo de 10 ponentes medio pobretones y más interesados en asistir a las actividades de un Encuentro Nacional no nos sirve de mucho porque le estamos reclamando a alguien que no tiene en su poder determinada cantidad de dinero. Sólo pedimos transporte, el resto nosotros. Y nos hablan de tiempo y forma requeridos para el trámite. Y nos dan papeles a llenar después de darnos la desilusión del dinero. Pero la responsabilidad es de alguien más arriba, que puede disponer en tres días de casi 44 mil pesos para un viaje. Y lo desesperante es que a nosotros nos resuelve con un sí un no o un "ve y luego te pago" hasta que el evento está por comenzar.
Lo que me castra es eso de los derechos, no como estudiantes, garantías que se supone son para todos aunque nadie las pueda ejercer porque no hay dinero. He escuchado de profesores que sienten afecto hacia la U de G, pero así como la universidad y el país no están dispuestos a ayudarme sin papeles de algún orden y tiempo y forma, dan ganas de solicitarles que hagan tales trámites en cada ocasión para pedirme algo. Estas cosas desaniman la acción social de cualquiera. Si de por sí no veo un verdadero compromiso, me salen con las cosas estas.
En fin, de ahí me mandaron a ver eso a otro lado y que ahí pagan por eliminatoria, a unos sí y a otros no, que de acuerdo a su habilidad y desempeño curricular porque no hay para todos. Y la presión de que cada día que espero el precio sube y sube y sube, hasta que ya no lo pu
>>>>Inserte monedas para terminar la entrada?
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