31 de enero de 2007

Casi humanos pero todavía filósofos

Quiero aclarar los siguientes puntos: 1: No entiendo cómo alguien puede mandar a otra persona una carta donde se explica una tabla de verdad en donde la tautología de dicho sentido puede ser un acto realmente consciente y se comience a decir, por una conclusión extraña y lejos del conocimiento del pueblo, que todo desencadena una acción violenta. es decir, que mientras los que se ponen a pensar en cómo ver a la violencia desde una actitud pasiva como las letras (favor de no sacar ningún debralle lógico a partir de la oposición actitud - pasiva - letras - violencia, ya hab´ra espacio para esto), donde de forma muy seguida se ve al pueblo como un protegé que necesita a huevo de nuestra formación como héroes, se está dejando al pueblo lejos de toda participación por el hecho de que han aceptado que para sofocar la propuesta del otro ser intelectualoide, debemos adoptar un lenguaje superior al de él. Sí, pasivos mis huevos, pero si realmente se quiere expresar una opinión, sería mejor que todos la entendieran y no sólo los privilegiados que han leído libros bajo determinado método lógico. 2: Con lo anterior, reconozco, por si no les había caído el veinte, que en aquella declaración que inflamó los corazones de muchos estudiantes, aquél "qué bueno" sirvió para mover a muchas personitas a escribir una carta tras otra acerca de los beneficios y las bondades que brinda la UNAM al pueblo, pero estas cartas nunca llegaron hacia donde realmente debieron llegar: a cualquier maldito lugar donde el autor no pueda experimentar un regocijo intelectual por lo que escribe y alguna otra persona lejos de la clase lectora de tablas de verdad y propuestas mareadoras haya entendido. 3: Sean simples al momento de escribir una manifestación de apoyo o contrapostura, realmente debemos dejar de utilizar las enumeraciones de nuestros puntos a tratar porque de nada nos serviría mandar nuestro pensamiento de tal manera hacia un público. un "qué bueno" sirve más que un debate que se le olvida a las personas simples como uno después de dos días. Lamentablemente, la simpleza es lo que le falta a este país. 4: entiéndase por simpleza algo que se pueda leer en voz alta para todo un público y que el público lo entienda, hay más gente que se preocupa por lo que hace el gobierno aparte de los estudiantes, aunque sólo trabajen y vean televisión, algo más productivo que lo que hacemos, también pueden tener una opinión a partir de la experiencia propia. 5: Estoy enojado por el asalto sufrido recientemente. No hablaré mal de ello, pero sé que estrañaré esos veinte pesos...

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