10 de enero de 2007

¿Habrá valido la pena?

Esto es para fingir demencia mientras encuentro a un personaje con Ñ, he leído y escuchado las sugerencias y soluciones, pero usar apodos y títulos nobiliarios no suena muy razonable. El título de esta entrada, sin embargo, no habla de este dilema eñero, sino de algo que ya había olvidado mencionar en este lugar: el pasado vale mucho para todo ser humano, incluso para el que reniega de él o finge desconocerlo. Por eso, hay gente que se pregunta si cada paso, cada acción, cada sueño, cada momento en que contemplamos algo habrá valido la pena al final de nuestra existencia, es decir, nuestro presente; y yo sólo llegué a preguntarme tal cosa en una ocasión: cuando, por ocio más que por otra cosa, fui a un tianguis y apreté un jitomate para ver si estaba bueno o no. Dejemos el texto ya conocido aparte, señoras, y díganme si habría valido la pena ir a un tianguis sabiendo que no iba a comprar nada y levantar de un puesto un jitomate para ver si estaba o no maduro, es una acción que no se toma en cuenta en la sociedad, pero sigo preguntándome si han valido la pena ese tipo de acciones. Señor psiquiatra, ¿qué hice mal? si tal hecho fuera una causa de algo más, al estilo del efecto mariposa, dígame a quién he matado o quién sufre ahora porque toqué un jitomate. No es una preocupación de mi vida diaria: tal hecho no cambió mi vida como al Salavin de Duhammel o como timbrar para que el camión se detenga, y sin embargo algo debió pasar, quiz´alguien me vio revisando los jitomates y, al ver que yo no compré, él tampoco compró. Y entonces tuvo más dinero esta persona, quizá para comprar unos tacos que le hicieron daño o un kilo de jitomates en otro puesto. No me toca a mí decir a quién he dañado al tocar un jitomate, a quién dañé ayer cuando me tropecé en la calle, a quién acabo de dañar con esta entrada. ¿a quién le toca decir si esta entrada habrá valido la pena?

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